ARTICULO
1 Director General del INICIB, URP, Lima-Perú. 2 Instituto de Investigación en Ciencias Biomédicas, Universidad Ricardo Palma, Lima-Perú. a Especialista en Oncología Medica. b Maestría en Investigación Clínica. c Doctorado en Medicina.
Introducción: El objetivo de este estudio fue evaluar los desordenes del sueño (DS) en un grupo de estudiantes
universitarios y estimar la relacion entre ansiedad e insomnio en el ambiente academico. Métodos: Se realizó
un estudio transversal, analitico y observacional en la Facultad de Medicina Humana de la Universidad Ricardo
Palma, durante el año académico 2017.
Dos cuestionarios validados, fueron admnistrados personalmente a
132 estudiantes despues de obtener su consentimiento informado: El Inventario de Ansiedad de Beck (BAI), y
el cuestionario de sueño de Oviedo ritmo sueño-vigilia del paciente.
Resultados: La edad media hallada fue
de 24.07 +- 2.14 ( 20-34 ), Según estado civil el 67.42% eran solteros. La prevalencia de insomnio según CIE10
fue de 31.8 % (95% CI: 27.3-39.2%) mas frecuentes en mujeres (61.9%) que en hombres (38.9%); y según DSM
IV fue de fue de 3.8 % (95% CI: 2.9-8.4%) mas frecuentes en estudiantes mujeres (80%) que en hombres (20%)
. La prevalencia de ansiedad clinicamente significativa (moderada y severa) fue de 9.1%, mas frecuente en
estudiantes mujeres (66.6%) que en hombres (33.3%). Se encontró una asociacion estadisticamente significativa
entre ansiedad e insomnio DSM IV con un OR:7.8 IC95% 1.16-52.26 p: 0.01.
Conclusión: La magnitud del
insomnio en estudiantes universitarios de la Universidad Ricardo Palma evidencia la importancia de examinar
la salud del sueño en esta poblacion. La asociacion entre ansiedad e insomnio es significativa, remarcando la
importancia de detectar y tratar oportunamente la ansiedad y no solo el insomnio.
Palabras clave: Ansiedad; Desordenes del sueño; Estudiantes; Universitarios; Estudio transversal; Medicina de estilode vida. (fuente: DeCS BIREME)
Introduction: The aims of this study were to assess Sleep disorders (SDs) in a group of university students in Perú
and to examine the relationship between SDs and anxiety. Methods: An observational cross-sectional, analitic
and observational study was conducted at Ricardo Palma University, Peru, during the academic year 2017.
Two
questionnaires were face-to-face administered to 132 students after obtaining their written consent: The Beck
Anxiety Inventory (BAI), and the Oviedo dream sleep-wake patient questionnaire for DS. Results: The average
age found was 24.07 + - 2.14 (20-34). According to marital status, 67.42% were single. The prevalence of insomnia
according to ICD10 was 31.8% (95% CI: 7.8-13.4%) more frequent in female students (61.9%) than in men (38.9%);
and according to DSM IV it was 3.8% (95% CI: 7.8-13.4%) more frequent in female students (80%) than in men
(20%). The prevalence of clinically significant anxiety (moderate and severe) was 9.1%, more frequent in female
students (66.6%) than in men (33.3%). A statistically significant association was found between anxiety and
insomnia DSM IV with an OR: 7.8 IC95% 1.16-52.26 p: 0.01. Conclusion: The magnitude of insomnia in university
students of Ricardo Palma university demonstrate the importance of examining sleep health in this population.
The association between anxiety and insomnia is significant, highlighting the importance of detecting and
treating anxiety promptly and not just insomnia.
Key words: Anxiety; Sleep Initiation and Maintenance Disorders; Students; Universities; Cross-Sectional-Studie; Lifestyle medicine. (source: MeSH NLM)
Los trastornos de salud mental según la Organización
mundial de la salud (OMS) son considerados como
una de las 10 primeras causas de morbilidad a nivel
mundial teniendo como poblaciones más vulnerables
a los jóvenes, particularmente universitaria1.
La
prevención es fundamental en esta población
considerando su vulnerabilidad para desarrollar
trastornos emocionales. Por ende, también van
en aumento los estudiantes que presentan algún
trastorno psicológico, lo cual se correlaciona con
las altas tasas de prevalencia de problemas de salud
mental en la población general2.
La ansiedad es la anticipación del fracaso, negatividad
sobre la autoestima, la valoración social negativa y
la pérdida de algún beneficio esperado3 Los jóvenes
que sufren elevada ansiedad en las evaluaciones,
a diferencia de los menos ansiosos, poseen menor
habilidad para el estudio4.
En Colombia, la ansiedad permitió identificar que
22.5% de los participantes presentó manifestaciones
cognitivas divididas en moderadas (19%) y graves
(3.5%), y que las manifestaciones fisiológicas fueron
reportadas por 18.5% de los participantes con
preponderancia de la intensidad moderada (13.5%).
Del mismo modo, se registró que el nivel de intensidad
grave (5%) de las manifestaciones fisiológicas fue
superior a la sintomatología cognitiva3. En Perú, en
un estudio realizado en la Facultad De Medicina
Humana De La Universidad Nacional Mayor De San
Marcos lo más resaltante fue la existencia de un mayor
porcentaje de ansiedad en alumnos del primer año
(26.4%) con respecto los alumnos del sexto año (8.9%)
con un nivel de ansiedad severo, considerándose una
mayor adaptación en los ciclos mayores5.
La vigilia y el sueño son estados fisiológicos de manera
cíclica6. El promedio de horas necesarias de sueño para
un adecuado estado de vigilia, va entre 7 a 9 horas7.
Cuando una persona no duerme en forma adecuada
presenta alteraciones, precipitándose hacia un estado
de ansiedad o estrés, con alteración y modificación de
las funciones cerebrales superiores o cognoscitivas6.
En la Universidad de Panamá se encontró que 35%
de la población presentaba en algún momento
de su vida una alteración del sueño, siendo el
insomnio el trastorno más común7 Se encontró alta
frecuencia de pobre calidad del sueño y excesiva
somnolencia diurna en los estudiantes de medicina
de la Universidad de Panamá. La calidad subjetiva
del sueño fue buena en el 48,6% de los participantes
y mala en el 51,3%7.
En un estudio de Colombia, El
insomnio fue considerado el trastorno de sueño más
común, las prevalencias oscilan entre 20% y el 45%, y
debido a sus consecuencias patológicas se constituye
como un problema potencialmente en el desarrollo de
una Sociedad8.En México; Algunos estudios consignan
una prevalencia del insomnio en las mujeres del 40%.
Con respecto al hipersomnio, se ha reportado una
prevalencia global del 16%9 En Perú; el 65% durmió 6
horas o menos y 28% cinco horas o menos. La calidad
subjetiva del sueño fue muy mala y bastante mala
en 29%; y un 30% tuvo eficiencia subjetiva del sueño
menor a 85%10.
Por ello planteamos la siguiente pregunta de
investigación: ¿Cuál es la asociación entre Ansiedad
y Trastornos del sueño en estudiantes matriculados
en el Quinto y Sexto año de Medicina Humana de
la Universidad Ricardo Palma en el periodo Julio–
Diciembre del 2017?.
Los estudiantes universitarios son uno de los grupos
donde se han llevado a cabo estudios en la en la
identificación de alteraciones mentales que podrían
afectar su rendimiento. Si bien la población estudiantil
es de fácil acceso en cuanto a la realización de este
tipo de trabajos; existe una creciente preocupación
en torno a la cada vez más temprana aparición de
trastornos mentales en poblaciones jóvenes. Debido
a que, en el medio académico, existen situaciones que
generan estrés y se asocian a la pérdida de control por
parte del estudiante3.
Debido a limitada información respecto a la relación
que tiene la ansiedad y los trastornos del sueño
especialmente insomnio e hipersomnia en estudiantes
de medicina humana, se plantea el presente trabajo
de investigación.
Se realiza un estudio Cuantitativo, Transversal, Analítico
y Observacional. La población de estudio fueron
estudiantes de medicina de la universidad Ricardo
Palma.
Se incluyó a los alumnos matriculados en el
sexto y quinto año de medicina humana por muestreo
no probabilístico censal. Se recolectaron la edad, sexo,
estado civil, número de cursos matriculados, y número
de cursos reprobados. Además, se evaluó los niveles
de ansiedad según la Encuesta Inventario de Ansiedad
de Beck (BAI).
Es un instrumento autoaplicable de 21
ítems, desarrollado para estimar ansiedad2-11.
Según el puntaje de este instrumento los niveles
de ansiedad son leve, moderado, y severo. Para el
presente estudio, se consideró los niveles moderado
y severo como la presencia patológica de ansiedad o
clínicamente relevante.
Las variables dependientes principales son el
insomnio e hipersomnio según el cuestionario de
sueño de Oviedo ritmo sueño-vigilia del paciente. El
cual consta de 15 ítems, la información recogida ayuda
Asociación entre ansiedad y trastornos d Rev. Fac. Med. Hum. 2018;18(3):20-26. (Julio 2018) el sueño en estudiantes
al diagnóstico de insomnio e hipersomnio según los
criterios diagnósticos CIE-10 y DSM IV9-12.
La información recolectada se ordenó en una base de
datos del programa Microsoft Excel 2010. El análisis
se dividió en dos fases: una fase descriptiva y una
analítica. Para la primera fase se procedió a determinar
las frecuencias absolutas y relativas de las variables
categóricas.
Además se obtuvo las medianas y rangos
intercuartíicos (RI) de las variables cuantitativas, post la
evaluación de la normalidad con la prueba estadística
de Shapiro Wilk. Para la segunda fase se trabajó con un
nivel de confianza del 95%. Para la estadística analítica
bivariada se utilizaron la prueba de chi cuadrado y t
de student.
Además, se cruzó las variables categóricas
utilizando modelos lineales generalizados, usando la
familia Poisson, la función de enlace log, y modelos
robustos; obteniendo las razones de prevalencia (RP). Se
consideró p < 0,05 como estadísticamente significativo.
La edad media hallada fue de 24.07 +- 2.14 ( 20-34 ), en aquellos con ansiedad moderada/severa, así como con trastorno de insomnio según CIE 10 y DSM IV.
Según estado civil el 67.42% predominantemente eran solteros en aquellos con ansiedad moderada/ severa, así como con trastorno de insomnio según CIE 10 y DSM IV.
De los ansiedad moderada/severa, el 66.6% correspondió a los que tenían cursos desaprobados, predominando la ansiedad en los estudiantes que SI tenían cursos desaprobados. Y de aquellos con insomnio según CIE 10, el 50 % correspondió a los que tenían cursos desaprobados, a diferencia de insomnio según DSM IV, el 60 % correspondió a los que no tenían cursos desaprobados, con predominio del insomnio en los que NO tenían cursos desaprobados. Según los estudiantes con ansiedad moderada/severa, el 66.7% correspondió a los que no realizaban actividades extracurriculares, con predominio de la ansiedad en los que NO tenían actividades extracurriculares. De los estudiantes con INSOMNIO CIE 10, el 61.9%,con
predominio del mismo en los que NO tenían
actividades extracurriculares. A diferencia de aquellos
con insomnio según DSM IV, el 80 % correspondió a
los que SI realizaban actividades extracurriculares.
La prevalencia de ansiedad clínicamente significativa
(moderada y severa) fue de 9.1%, mas frecuente en
estudiantes mujeres (66.6%) que en hombres (33.3%).y
La prevalencia de insomnio según CIE10 fue de 31.8 %
mas frecuentes en estudiantes mujeres (61.9%) que
en hombres (38.9%); y según DSM IV fue de fue de 3.8
% más frecuentes en estudiantes mujeres (80%) que
en hombres (20%).
Se encontró una asociación estadísticamente
significativa entre ansiedad e insomnio DSM IV con un
OR:7.8 IC95% 1.16-52.26 p: 0.01 ; de los estudiantes
con insomnio el 40 % presentaban ansiedad versus el
9% de aquellos sin insomnio tenían ansiedad (p < 0.01).
La ansiedad está ampliamente relacionada con los
trastornos del sueño, lo que genera que definitivamente
la calidad de vida disminuya en varios aspectos, así
como en el ámbito académico, que por supuesto para
un estudiante es uno de los aspectos más importantes.
El presente estudio revela que la ansiedad tiene una
relación directa con el insomnio, en una población
que debería tener un óptimo rendimiento, así mismo,
investigaciones en otros países muestran una relación
importante. Choueiry13 en un estudio realizado en el
Líbano en universitarios, demostró que la ansiedad
clínicamente significativa es más frecuente entre los
estudiantes que manifiestan insomnio (p=0.006);
además, Günes14 demostró que la ansiedad no solo
afecta la calidad del sueño sino también incrementa
la gravedad del insomnio e incluso predispone al
desarrollo de trastornos afectivos como la depresión.
Así mismo, Kirwan15 sostiene que la dificultad para el
manejo de la ansiedad entre estudiantes universitarios
de diferentes carreras supone el incremento de la
severidad de los trastornos del sueño, específicamente,
del insomnio (p =0.001).
Por otro lado, se observa que los trastornos del sueño
como la hipersomnia no son prevalentes en nuestra
población lo que no necesariamente demuestra que
existan menos trastornos que aquejen a nuestra
población. Por el contrario, otras poblaciones
demuestran que la hipersomnia se superpone
como uno de los trastornos más importantes del
sueño debido a su asociación con la ansiedad y
otros trastornos emocionales como la depresión.
Según esto, Kofell y Watson en una investigación
realizada en un grupo compuesto por tres subgrupos:
estudiantes universitarios, adultos mayores y
pacientes psiquiátricos, mostraron que los trastornos
del sueño como el insomnio y la hipersomnia estaban
asociados significativamente con los síntomas y el
diagnóstico de la ansiedad y de la depresión, además
dentro del subgrupo de estudiantes universitarios,
la hipersomnia estuvo estrechamente relacionada
con la exacerbación de la ansiedad y más aún con la
depresión16.
En cuanto a la edad algunas investigaciones afirman
que la época académica forma algunos disturbios en
cuanto a el ciclo del sueño, ya sea por la misma carga
académica o por diferentes motivos. Convirtiendo
esto en causa de problemas tanto en la vida personal
como en la formación profesional. De acuerdo a
esto, Samaranayake17 mostró que de un grupo de
estudiantes universitarios con un promedio de edad de
20 años, aproximadamente el 40% de ellos reportaron
tener síntomas relacionados con algún trastorno del
sueño y una de las causas más prevalentes de estos
trastornos fue la ansiedad. Además la prevalencia de
ansiedad fue del 19.7% del grupo de universitarios
estudiados. Narizawa27 sostuvo que los desórdenes del
sueño se manifiestan principalmente entre los adultos
jóvenes con una edad promedio de 20.6 +/- 1.7 años, y
entre quienes el nivel de ansiedad elevado es un factor
asociado al desarrollo de un trastorno del sueño.
Según la presente investigación, la prevalencia
de insomnio según CIE 10 fue del 31.8 % siendo
las mujeres (61.9%) quienes manifiestan la
sintomatología clínica del insomnio con mayor
frecuencia en comparación con los varones; y según
DSM IV fue de 3.8 % presentándose más entre las
estudiantes mujeres (80%). De manera semejante,
la prevalencia de ansiedad clínicamente significativa
(moderada y severa) fue de 9.1%, y nuevamente las
mujeres reportaron sintomatología correspondiente
a la ansiedad en la mayoría de los casos. De manera
semejante, otros estudios confirman estos resultados.
Taylor y Col. en un estudio realizado en estudiantes
universitarios obtuvieron una prevalencia de insomnio
crónico de 9.5%, y particularmente este grupo
también reportó niveles significativos de ansiedad18.
Chen et al obtuvo una prevalencia de insomnio mayor
a la obtenida en el estudio antes mencionado, siendo
esta del 17% en un grupo de 500 participantes chinos
aproximadamente, y fueron las mujeres quienes
reportaron en mayor proporción sintomatología
clínica de insomnio19.
Los resultados de este estudio identifican ciertos
factores asociados con mayor frecuencia a ansiedad y
factores asociados con mayor frecuencia a insomnio,
sin embargo, no alcanzan significancia estadística,
probablemente por el tamaño de la muestra. Nuestro
estudio es el primer reporte que aborda la ansiedad y
los trastornos del sueño en estudiantes de Medicina
Humana, en la Universidad Ricardo Palma, mostrando
resultados positivos de asociación y enfatizando
su importancia dentro del ámbito académico y
universitario.