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PAIDEIA XXI
Biocombustibles para el Parque Automotor de Lima Metropolitana y el Callao
LÍNEA BASE: COMBUSTIBLES USA-
DOS HASTA LA DÉCADA PASADA
Durante el siglo pasado y hasta la
primera década de este siglo, el par-
que automotor de Lima Metropolitana
y Callao utilizó los siguientes combus-
tibles: gasolina 84, gasolina 90, ga-
solina 95, gasolina 97 y diesel 2. Ac-
tualmente el parque automotor tiene
a su disposición una gama variada de
nuevos combustibles: gas natural ve-
hicular (GNV), gas licuado de petróleo
(GLP), gasohol 84, gasohol 90, gasohol
95, gasohol 97 y diesel B5. Tanto los
gasoholes como el diesel B5 contienen
biocombustibles y se comercializan
desde el año 2012.
Las antiguas gasolinas y el diesel
eran combustibles muy contaminan-
tes. En el caso de las gasolinas, el
contaminante principal era el plomo
que se agregaba en forma de plomo
tetraetílico para elevarles el octanaje.
El plomo tiene la característica de que
es un tóxico acumulativo bioadapta-
ble, es decir, que puede introducirse
en la cadena tróca que va del suelo
a los vegetales, luego a los animales y
nalmente al hombre. La intoxicación
crónica es la forma más frecuente y de
mayor importancia para las personas.
La afectación se produce cuando los
compuestos de plomo son metaboli-
zados en el hígado; si hay un exceso
de plomo, éste pasa a la circulación
sanguínea y principalmente se ja en
el esqueleto, dientes, médula ósea y
cerebro, afectando los sistemas cir-
culatorio, reproductor y nervioso, así
como los riñones. Por eso, altos nive-
les de exposición al plomo producen
su bioacumulación y generan en la
población encefalopatía, efectos gas-
trointestinales, anemia, nefropatía y
anomalías electrocardiográcas; tam-
bién causa retraso en el desarrollo
fetal, llegando al aborto espontáneo
y, asimismo, origina la disminución
de la fertilidad en los hombres. Estos
problemas de salud fueron detectados
en la segunda mitad del siglo pasado
y la mayoría de los países cesaron el
agregado de plomo tetraetílico en las
gasolinas. En la década del 90, en el
Perú habían dos gasolinas que no con-
tenían plomo: las gasolinas de 90 y 97
octanos, y dos gasolinas con plomo:
las de 84 y 95 octanos. En 1998, el go-
bierno peruano emitió el Decreto Su-
premo Nº 019-98-MTC, que en su Ar-
tículo 1º prohibió la comercialización
de la gasolina 95 con plomo y, desde
ese mismo año, se empezó a vender
sin plomo. Asimismo, dicha norma or-
denó que durante los años siguientes
se redujera paulatinamente el conte-
nido de plomo tetraetílico en la gasoli-
na de mayor venta, la de 84 octanos,
terminando dicha reducción el 31 de
diciembre de 2004. Es por eso que
desde el 1º de enero de 2005 ninguna
gasolina en el Perú contiene plomo.
En el caso del Diesel, el contami-
nante principal ha sido el azufre. A
diferencia de las gasolinas, en que se
agregaba el plomo que las contamina-
ba, el Diesel ya contenía gran cantidad
de azufre debido a que este contami-
nante venía con el petróleo desde el
yacimiento, y la operación de destila-
ción del petróleo solo distribuía el azu-