Protección Radiológica contra Radiaciones No Ionizantes de los Servicios de Telecomunicaciones
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PAIDEIA XXI
16), llevado a cabo usando un proto-
colo básico común, cuyo objetivo prin-
cipal fue evaluar si la exposición de ra-
diofrecuencia de los teléfonos móviles
está asociada con el riesgo de cáncer,
se tiene que no hay un incremento de
la incidencia de tumores en la cabeza
y cuello para periodos cortos. Sin em-
bargo, hay estudios que indican una
mayor incidencia de gliomas y neuri-
nomas acústicos para periodos de uso
mayores a 10 años; pero se sospechan
que estos resultados se deben en parte
a sesgos de los estudios como los re-
lacionados con el recuerdo y la selec-
ción. Debido a estos resultados, las ra-
diaciones de radiofrecuencia han sido
clasicadas por la Agencia Internacio-
nal de Investigación del Cáncer (IARC)
como cancerígenas Grupo2B (10). Sin
embargo, esta clasicación que es la
misma que la clasicación del café, so-
lamente es una manera de decir que
los estudios en seres humanos (epide-
miológicos) son insucientes y limita-
dos, y que los estudios en animales (in
vivo) no aportan pruebas sucientes
de un aumento de incidencia o pro-
moción del cáncer para exposiciones
crónicas o semicrónicas. Por ello, esta
clasicación no hace otra cosa que re-
conocer que los campos de radiofre-
cuencia “no son cancerígenos para los
seres humanos (Grupo 1)”, ni tampo-
co, probablemente, cancerígenos para
los seres humanos (Grupo 2A)”. En
consecuencia, es necesario seguir in-
vestigando con estudios epidemiológi-
cos y biológicos y otros estudios com-
plementarios que conrmen o recha-
cen los resultados epidemiológicos.
Sensibilidad de los niños
En el año 2000, el Reporte Stewart
del Grupo Experto Independiente en
Teléfonos Móviles del Reino Unido (17)
recomendó limitar el uso de los teléfo-
nos móviles por parte de niños meno-
res de 16 años como una medida pre-
cautoria. El Reporte Stewart del Reino
Unido, entre otras conclusiones, seña-
la: “Si hubieran realmente efectos ad-
versos a la salud no conocidos produ-
cidos por el uso de teléfonos móviles,
los niños podrían ser más vulnerables
debido a su sistema nervioso en de-
sarrollo, la gran absorción de energía
en los tejidos de la cabeza y un ma-
yor tiempo de vida de exposición. De
acuerdo con nuestro alcance precau-
torio, creemos que el amplio uso de los
teléfonos móviles por niños para lla-
madas no esenciales debe ser dismi-
nuido. También recomendamos que la
industria de teléfonos móviles debería
frenar la promoción del uso de teléfo-
nos móviles por parte de los niños”.
Estas conclusiones fueron endosa-
das por el Reporte Zmirou (18), de la
Dirección General de Salud de Fran-
cia, y raticadas en el Informe del
Consejo Nacional de Radioprotección
del Reino Unido (NRPB), de 2004.
En el Taller de la OMS “Sensibi-
lidad de los Niños a la Exposición a
los CEM”, realizado en junio de 2004,
en Estambul-Turquía (19), algunas
conclusiones de los trabajos presen-
tados, señalan que el uso de los telé-
fonos móviles entre los adolescentes y
jóvenes es muy alto, incluyendo a los
sectores sociales menos favorecidos y
la tendencia es que se siga incremen-