Palma como político
DOI:
https://doi.org/10.31381/test2.v0i13.131Resumen
En 1872, Ricardo Palma publica la primera serie de las Tradiciones, y, en ese mismo año, decide apartarse de la política. La decisión no es sencilla, pues a pesar de sus treinta y nueve años, desde muy joven se había entregado a la crítica de los gobiernos de turno y a los ajetreos en la formación de un partido liberal. Como ocurre a menudo en este orden de cosas, su alejamiento fue progresivo y producto de una actitud emocional, pues su dedicación a la política durante casi dos décadas fue una inevitable respuesta a las turbulentas circunstancias que se vivían en el país por entonces, basado en su apego a sus ideas y en su temperamento irreverente.